Hoy enciendes el ordenador para ponerte a trabajar y de repente no hay wifi … ¿qué haces? ¿te desesperas? ¿te bloqueas? ¿te pones a despotricar?
o … el niño tira el tazón de leche a 5 minutos para salir.. ¿qué haces? ¿le gritas? ¿te enfadas? ¿te pones a llorar?
La realidad es que tu reacción está directamente relacionada a tu estado anímico, a como tú te sientes, a, si cuando has empezado a trabajar o cuando has metido el desayuno al niño,, ya estabas nerviosa o estabas en paz contigo misma, si estabas pensando en todas las otras tareas personales y laborales que tenías que solucionar o si siente que puedes concentrarte 100% en cada tarea que estás haciendo porque lo demás está controlado.
Porque no hay duda de que los imprevistos se solucionan más y mejor SIEMPRE desde la calma y la tranquilidad.
Lo sabes … pero ¿lo practicas cada día? ¿lo practicas delante de los problemas diarios?
¿Y cómo lograr esa paz? ¿cómo conseguir tener la sensación de tener todo controlado?
Teniendo controlado primero tu cuerpo y tu mente, en pocas palabras, cuidándote, dándote espacio y tiempo para ti misma, para tus necesidades y deseos, de forma alineada a tu estado físico y emocional.
Te explico como hacerlo en mi nueva clase gratuita «Verano de autocuidado para madres emprendedoras: elige las mejores actividades de cuidado personal según tus fases cíclicas».
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